10 pasos para sobrevivir al contrato de verano

Como sabemos, empezamos ahora un período en el que muchos compañeros/as empiezan a trabajar haciendo sustituciones en diferentes hospitales. Son los tan deseados y esperados “contratos de verano”.

Más allá del objetivo de trabajar durante estos 3 meses y ganar un dinero y crecer como profesionales, encontramos otro objetivo, no menos importante, que es el aprendizaje. Muchos de vosotros habéis tenido pocas ocasiones de desempeñar vuestra profesión en un hospital, y ahora tenéis una oportunidad de oro que tenéis que saber aprovechar bien.

El tiempo pasa rápido, así que es fundamental que desde el primer día, saques todo el partido a ese contrato de verano. Para ayudarte, como ya hicimos hace tiempo para los estudiantes en prácticas hemos preparado este decálogo que puedes seguir, si quieres que tu contrato de verano suponga además, un cambio cualitativo en tu preparación y experiencia como enfermero/a.

Vamos a ello:

1.- Pásate por allí una semana antes. Acude a tu lugar de trabajo antes de que empiece tu contrato, preséntate a tus compañeros, y dedícales un poco de tiempo. Podrás ir familiarizándote con el nuevo lugar, y te ayudará también a que los primeros días vayas menos perdido/a.

2.- Sé profesional. Demuestra que eres una persona formal, evita llegar tarde, respeta los relevos, cuida mucho el material con el que vas a trabajar, mantén una higiene de lo más estricto, etc.

3.- Adáptate al nuevo equipo. Aunque el trabajo en muchas ocasiones sea muy similar, siempre hay normas no escritas que marcan la forma de hacer las cosas entre compañeros/as. Apréndelas poco a poco, y aplícalas como uno/a más del equipo.

4.- Ten claro tus objetivos. Recuerda que estás allí para trabajar (y ganar dinero) pero también para aprender. Mantén una actitud curiosa y asume tantos conocimientos como puedas, el día de mañana lo agradecerás.

5.- Observa. Trabajar con gente que tiene más experiencia es una suerte, ya que puedes aprender mucho de ellos. No sólo de los enfermeros/as, sino también de los médicos y auxiliares. Fíjate bien en cómo trabajan, y aprende de ellos.

6.- Sé proactivo/a. Estás trabajando con pacientes reales, y eso debes saber aprovecharlo. Infórmate bien de sus historias clínicas, de su evolución, sus tratamientos y de los resultados.

7.- Haz preguntas. Muchas veces evitamos preguntar las cosas, porque nos da miedo dar una mala impresión. Nadie nace sabiendo, y aunque muchos conocimientos ya debemos traerlos aprendidos de la facultad, no está de más preguntar lo que no sabemos. No te quedes con dudas.

8.- Toma notas. Como decíamos en el punto 7, es bueno hacer preguntas, pero tampoco se trata de preguntar lo mismo 5 veces. Toma notas de las explicaciones y repásalas cada vez que puedas.

9.- Sé humano/a. Recuerda que los pacientes no eligen estar allí, y además de todos los cuidados profesionales imprescindibles, es fundamental que sientan que están en las mejores manos. Háblales de forma cercana, sonríe, y genera confianza.

10.- Cuenta con tu supervisor/a. Si tienes cualquier problema, o hay algún tema que necesites tratar, háblalo con tu supervisor/a en privado.

¡Os deseamos todo lo mejor para esta etapa de contratos de verano!

[box type=»download»]Prepara las Oposiciones de Enfermería con nosotros y ¡Consigue tu plaza![/box]